Los Medios de Comunicación, un actor clave para paliar los efectos del Covid-19
En esta crisis sanitaria, sin precedentes, que está asolando el mundo, en general, y nuestro país, en particular, cada stakeholder, con peso social, ha enarbolado la bandera de la solidaridad y el compromiso. Es el caso, también, de los medios de comunicación.
Desde ACH nos gustaría rendir nuestro particular homenaje a este colectivo, con el que colaboramos estrechamente y que es fundamental en el desarrollo de nuestro trabajo. Los medios se han convertido, por derecho propio, en un actor clave para ayudar a la sociedad a sobrellevar los efectos demoledores que ha generado la pandemia de coronavirus, tanto a nivel personal como profesional.
En estos días, se han visto obligados también a reinventarse para satisfacer las necesidades, expectativas y anhelos de una sociedad que lucha por seguir adelante y recomponerse ante una situación que nos ha sobrepasado a todos. Han adoptado diferentes roles: informar, concienciar, denunciar, divulgar, entretener, animar o, simplemente, acompañar. Desde la mañana hasta la noche, durante toda la semana. Más allá de ideologías partidistas y matices políticos -que los hay, obviamente- se han dado cuenta del poder que tienen para aliviar la carga psicológica de millones de españoles y poner su granito de arena en tiempos de coronavirus.
La televisión y la radio, aparte de informar en tiempo real de lo acontecido, están desempeñando diferentes funciones:
- Se han erigido en solucionadores de las dudas y los problemas que se le plantea a la población, poniéndola en contacto con profesionales, después de tantos decretos y sus derivaciones en tiempo récord.
- Se han convertido en un canal de denuncia activa ante situaciones injustas o de necesidad, a las que hay que dar respuesta inmediata. Hay que destacar la denuncia de las fake news, que tanto dañan a los ciudadanos, provocándoles un estado de alarma innecesaria.
- Se han alzado como los principales altavoces de las iniciativas solidarias de la ciudadanía a lo largo y ancho del territorio español para crear conciencia y seguir reforzando el torrente de solidaridad, tan necesario, que ha surgido en estos días.
- Han dado voz a los ciudadanos, para que puedan expresar, en primera persona, cómo se sienten y cómo se han organizado durante el confinamiento. Un ejemplo claro lo tenemos en Diario de la Cuarentena, una iniciativa de Buenos días Madrid (Telemadrid).
- Han creado espacios de entretenimiento activo para toda la familia, con el objetivo de que dejemos de pensar, durante un rato, en la situación por la que atravesamos.
En definitiva, hemos sentido, más que nunca, la cercanía de estos profesionales de los medios que se han emocionado, ilusionado y reído a la par que el resto de los españoles. Nos han arropado en el dolor a un país, el nuestro, que se mueve entre el duelo y la esperanza.
Particularmente reseñable es la compañía que ofrecen a las personas de la tercera edad, recluidos en su casa y con el temor pegado a la piel -al ser población de riesgo-. Hay abuelos y abuelas que viven solos y que sólo tienen contacto telefónico con sus familiares y amigos. En estos casos, la televisión y la radio son fieles compañeros de fatiga y les hacen olvidar, por momentos, que han de estar solos por necesidad durante el tiempo que dure el confinamiento.
Por otro lado, la prensa digital también ha cambiado su patrón de conducta en estos días tan insólitos, situándose al lado de las compañías que forman el tejido empresarial de este país. Pese a la caída de ingresos por publicidad, los medios han intentado apoyar a las empresas, con las que colaboran habitualmente, apostando por implementar cuatro líneas de actuación en aras del bien común:
- Potenciar su rol como generadores y transmisores activos de contenido. En este sentido, publicaciones como Corresponsables están animando a las empresas a enviarles sus iniciativas sociales, ambientales y solidarias para paliar los efectos del coronavirus, con el objetivo de publicarlas en su web y darles difusión. En estos momentos las compañías no deben perder visibilidad para mantener el contacto con sus clientes y potenciales clientes.
- Poner a disposición de los navegantes todas las revistas que, hasta ese momento, eran de pago -previa suscripción o se compraban en el quiosco-. Vogue, Vanity Fair, Elle, Cosmopolitan, Forbes o Muy Interesante son sólo algunos ejemplos.
- Ofrecer publicidad gratuita en los números de abril y mayo, como ha propuesto Ediciones Peldaño en su revista Restauración News, líder en el sector de la hostelería y la restauración, que, puntualmente, seguirá maquetándose y colgándose en la web.
- Convocar encuentros virtuales con presentaciones de interés o tertulias en abierto, como es el caso de los medios de publicidad y marketing IPMark y su webinar Comunicar en un entorno de crisis global o Reason Why. Se trata de no perder el contacto para evitar que las compañías desaparezcan totalmente del foco mediático.
Hay que darse cuenta que estamos viviendo dentro de un paréntesis, donde el tiempo es relativo. Cuando consigamos cerrarlo, la vida recuperará su ritmo. Lo importante es que, cuando llegue ese momento, todos sigamos dentro de la foto.